Este
dolor se tiene que arreglar con algo.
No
se puede sufrir de esta manera tan injusta
sin que la vida nos entregue otra
cosa a cambio.
Este
dolor tiene que terminar un día;
romper con los dientes tanto desengaño;
que vengan los padres y nos besen;
que lleguen las madres y nos acunen;
que vuelva la primavera y lo desborde todo
de verdad y de milagros.
Porque
es injusto sufrir de esta manera.
No
hemos cometido otro pecado
que el de querer y confiar en la esperanza
y estar sin la esperanza todo el rato.
Este
dolor tiene que terminar un día.
La
vida tiene que entregarnos algo
de lo que nos debe
a todos los que creímos
tanto en la justicia
y en la alegría
y estamos llorando.